El sistema de producción de carne y de lana de oveja están ligados fuertemente al crecimiento anual de las praderas naturales y, en algunos casos, en las épocas de mayor demanda alimenticia se suministran suplementos (concentrados, heno, ensilaje) y/o reservas (praderas rezagadas, heno en pie).
Los sistemas de producción dependen de las condiciones climáticas, del tipo de rebaño y de las características del mercado de destino existiendo:
Chile se puede dividir en cuatro grandes áreas de producción de carne y de lana:
EL PRODUCTO CARNEO
El producto obtenido en un animal especializado en la producción
de carne es de mayor calidad por ser más magro, es decir, estos
animales depositan menor contenido de grasa a una misma edad, con lo que
además se obtiene un mayor rendimiento de canal. Para resultados
óptimos se faenan con una edad máxima de 4-5 meses ( 20-40kg
de peso vivo).
La carne de ovino en el país está poco difundida existiendo
un consumo esporádico de este producto. En el mercado es posible
adquirir animales completos y trozados. En general los cortes que se pueden
obtener son:
La carne de consumo nacional Chileno se comercializa normalmente en los supermercados y carnicerías existiendo también en fechas específicas como Fiestas Patrias, Navidad y Año Nuevo un comercio informal de corderitos (lechones).
EL PRODUCTO LANIGERO
Una oveja lanera produce mayor cantidad de lana (hasta 5 kg/animal) y más fina que una oveja de doble propósito o de carne. La lana proviene de distintas partes del cuerpo, originando lanas de diferentes tipos y calidades:
La lana producida en el país se utiliza en la fabricación de prendas de vestir (lana fina), de colchones y rellenos en general (lana gruesa), teniendo que sufrir varios procesos antes de estar preparada para la confección.