Figura 11. | Componentes de una flor de haba. |
Entre 5 y 50% de la polinización ocurre en forma cruzada, pudiendo llegar incluso a valores tan altos como 70%. El porcentaje dependerá en definitiva del cultivar, de las condiciones climáticas y de la población de insectos polinizadores. De cualquier forma, la polinización cruzada generalmente alcanza entre 30 y 50%.
Las flores se presentan dispuestas en inflorescencias
que corresponden a cortos racimos axilares (Figura 12). En una planta el
número de flores por racimo varía entre dos y seis, alcanzándose
un promedio que varía entre tres y cuatro.
Figura 12. | Flores abiertas y dispuestas en racimos. |
Aunque la mayor parte de los racimos produce
entre tres y cinco flores, en los cultivares de la variedad major
lo común es que se obtenga entre cero y dos vainas por nudo. En
este sentido, en un 80% o más de los nudos reproductivos se produce
una absición total, ya sea de flores o de vainas jóvenes;
en el restante 20%, que corresponde a los nudos reproductivos de posición
más basal, los racimos presentan aproximadamente un 65% de absición
de elementos reproductivos, siendo, en definitiva, el 35% restante el que
origina la producción de vainas en cada planta. Esta situación
determina que el número promedio de vainas por nudo, a nivel de
toda la planta, sea muy bajo, habiéndose evaluado para cultivares
del tipo Aguadulce un valor de tan sólo 0,3 vainas por nudo.
Los antecedentes señalados determinan
que, si bien cada planta puede llegar a producir más de 300 flores,
considerando un total de 80 a 100 nudos reproductivos totales por planta,
el porcentaje de cuaja no supera en promedio el 10 a 15%.
El elevado porcentaje de absición
que ocurre en haba se basa en la gran competencia por asimilados que se
produce, tanto a nivel de cada racimo, como a nivel de la planta completa.
En este sentido, el sistema vascular común que presenta cada racimo
no logra abastecer todos sus elementos reproductivos. Por otra parte, debido
al tipo de floración y a lo extenso del período, llega una
etapa en que las plantas presentan simultáneamente crecimiento de
tallos y hojas, apertura de flores, crecimiento de vainas y llenado de
granos.