Tres días antes del nacimiento los huevos se trasladan a las nacedoras, donde la temperatura permanece en 37,5º C, aumentando ligeramente el porcentaje de humedad relativa (65-70 % ) para facilitar el movimiento del embrión en la cáscara. En el paso a la nacedora se verifica la fertilidad del huevo observándolo a través del ovoscopio y eliminando aquellos huevos infértiles, los que se ven traslúcidos o claros.