Aproximadamente 1 semana después de la emergencia, y cuando la radícula tiene entre 4 y 5 cm, se inicia la formación de las raíces laterales. Alrededor de 3 semanas luego de la emergencia, las raíces laterales comienzan a originar raíces secundarias, las cuales, posteriormente, darán lugar al desarrollo de raíces terciarias.
La raíz principal comienza a engrosar
cuando la planta presenta alrededor de cinco hojas (Figura 4). El eje central
de la raíz principal de la remolacha es algo fibroso y está
constituido por una aglomeración de pequeños vasos que se
comunican con las hojas. La superficie de la raíz principal, en
tanto, corresponde a una delgada capa de periderma de color blanco amarillento.
Planta de remolacha comenzando a engrosar su raíz principal. |
La forma de la raíz principal carnosa
es un aspecto importante en el mejoramiento genético, ya que se
relaciona con la mayor o menor dificultad para la realización de
la cosecha mecanizada. En este sentido, la forma determina la altura de
la corona (Figura 5) e influye sobre la cantidad de tierra que quede adherida
a la raíz.
Raíz principal carnosa y corona; esta última corresponde a un tallo comprimido con internudos muy cortos, desde el cual nacen las hojas. |
Planta de remolacha con su raíz principal engrosando, en que se observa su forma cónica característica. |
El centro de la raíz carnosa se asemeja a la forma de una estrella; su pulpa, que es muy densa y quebradiza, no da jugo, a menos que sea prensada. La mayoría de los cultivares de remolacha presenta la pulpa de color blanco invierno.
La raíz carnosa presenta dos surcos
diametralmente opuestos, los cuales nacen cerca de la corona y se prolongan
verticalmente hacia abajo (Figura 7). A partir de estos surcos se originan
las raíces laterales de mayor importancia.
Surco de la raíz carnosa a partir del cual se originan raíces laterales. |
Sistema radical y su distribución en un suelo sin limitaciones. |
Corte transversal de la raíz carnosa en que se aprecian los anillos vasculares concéntricos. |
La sacarosa, que es el azúcar que
se extrae de la raíz carnosa, se almacena en las vacuolas de las
células parenquimáticas y su mayor concentración se
presenta en las células cercanas a los haces vasculares. Por esta
razón, mientras mayor sea el número de anillos y más
cercanos se presenten éstos entre sí, mayor será el
porcentaje de sacarosa en la raíz. En este sentido, fertilizaciones
excesivas o bajas poblaciones promueven un crecimiento exagerado de las
raíces, lo que determina una reducción en el porcentaje de
sacarosa. La concentración de sacarosa es mayor en la sección
de la raíz carnosa que presenta mayor diámetro, disminuyendo
progresivamente hacia ambos extremos (Figura 10).
Distribución porcentual de la sacarosa en la raíz carnosa. |