La
producción comercial de aves comenzó en los EEUU de Norteamérica,
desarrollándose posteriormente en Europa en una forma similar, unos
10 años después. Las investigaciones en los sistemas de producción,
luego del descubrimiento de las leyes de Mendel, estuvieron centradas en
los hallazgos en 1905, en trabajos con maíz. Así, el investigador
Shull fue el primero que empleó la palabra ́heterosisî para designar
el vigor de la primera generación de híbridos.
Sin embargo, fue el norteamericano Warren en 1924, quién comenzó
los estudios de hibridaje en aves en la estación experimental Agrícola
de Kansas.
Los primeros trabajos se realizaron en aves de postura, utilizando
las razas White Leghorns y Rhode Island Red, sin embargo las aves de carne
hasta 1940 sólo fueron un subproducto de la producción comercial
de huevos. El verdadero desarrollo de las aves de carne (broilers) fue
posterior a 1940, siendo en los años 50 una industria muy próspera
y en plena expansión. Países como Chile comenzaron a adoptar
estas tecnologías hacia mediados y fines de los 50 y desde entonces
se ha desarrollado vertiginosamente, siendo hoy día una actividad
de gran capacidad tecnológica y productiva, tanto para el abastecimiento
interno como para los mercados de exportación en el caso de la carne.
Tanto en el exterior como en Chile, la industria avícola pasó
de un sistema de tenencia de muchos productores pequeños a grandes
empresas verticales y especializadas
en carne o huevos. Esta integración ha permitido, además
de una gran autonomía en la gestión de producción,
la entrega al mercado de una gran variedad de productos de alta calidad
y valor agregado.
La cadena de producción comienza en los planteles de reproducción, donde se obtienen los huevos fértiles que darán origen finalmente a las aves comerciales. Para ello debe cuidarse el manejo de los huevos (recolectándolos 2 y hasta 4 veces diarias) y la alimentación de los reproductores para lograr buenos índices de nacimientos durante el proceso de incubación posterior.
Las construcciones para el manejo de las aves son bastante simples,
variando sólo el diseño interno y si son cerrados o abiertos.
Las construcciones sin embargo son muy importantes, ya que las aves deben
tener un ambiente adecuado que les permita expresar su máxima capacidad
productiva, sin un gasto excesivo de energía en funciones de termorregulación
corporal.
La estructura de los galpones puede ser de fierro o madera, el techo
de algún material liviano (pizarreño) con o sin una abertura
en la parte superior (lucarna) y un piso de concreto (radier) para facilitar
el aseo.
Puede ser una construcción totalmente cerrada con ambiente totalmente controlado especial para climas extremos, teniendo un mejor manejo, mayor producción y densidades más altas de aves; pero mayores costos. También puede ser una construcción abierta combinando paredes con mallas y ambiente semi controlado (estufas, extractores), siendo de menor costo y más conveniente para las condiciones climáticas de Chile, por ser éstas menos rigurosas.
Las aves deben estar aisladas, lejos de animales y personas para impedir cualquier tipo de contagio y factores estresantes.
Dada la gran diferencia entre la producción de carne y la producción de huevos, éstas se analizarán en forma separada:
CARNE:
HUEVOS: