Mantención de una temperatura corporal que permita todas las funciones metabólicas en forma óptima.
 

Es el primer período de la vida post-natal, va del nacimiento hasta los 28 días de vida. Se caracteriza por los cambios físicos que ocurren en el niño para adaptarse a la vida extrauterina. Entre los más importantes se destacan el ajuste circulatorio y respiratorio, la termorregulación y la puesta en marcha de los sistemas de eliminación.

El recién nacido tiene absoluta dependencia de los adultos para mantener la vida, quienes desempeñan el rol de agente de autocuidado realizando por él todas las acciones requeridas para satisfacer sus necesidades. Esencial en esta etapa es una adecuada vinculación afectiva con sus padres y familia, pues determina el establecimiento de sus relaciones interpersonales futuras.