CABEZA
VISCERAS DEL CUELLO
LARINGE

Conducto que conduce el aire desde la faringe hacia la traquea. Se forma por la superposición de los cartílagos laríngeos, cubiertos internamente por mucosa respiratoria, situado por delante de la región inferior de la faringe, con la cual se comunica a través de aditus laríngeo. Hacia ventral este conducto se relaciona con la lengua y el hueso hioides, continuándose con la traquea hacia caudal. Su límite superior (borde superior de la epiglotis) corresponde al cuerpo de la tercera vértebra cervical; su límite inferior (borde inferior del cartílago cricoides) se encuentre a nivel del borde superior de la sexta cervical. En los niños y en la mujer este conducto se encuentra más alto.

Cartílagos impares: Cartílago tiroides, parece a un libro abierto hacia atrás, presenta dos láminas que se unen en la línea media formando un relieve en el cuello, la prominencia laríngea (bocado de Adán). Sirve de escudo que cubre por ventral a la laringe. Su borde superior presenta la escotadura tiroidea; su borde inferior cubre parcialmente al cartílago cricoides; sus bordes posteriores prestan inserción al constrictor inferior de la faringe y se prolongan hacia arriba y abajo en forma de dos apófisis o astas. En el aspecto lateral de cada lámina se observa la línea oblicua que limita un sector posterior, donde se inserta el músculo esternotiroideo y, un sector anterior, donde lo hace el músculo tirohioideo. Los ligamentos vocales se insertan en el aspecto interno del ángulo del tiroides.

Cartílago cricoides, correspondería al primer anillo traqueal modificado que le da soporte a la laringe. Tiene la forma de un anillo con la placa orientada hacia posterior, se articula lateralmente con el cartílago tiroides y, en los ángulos laterales de la placa cricoídea se articula con la base de los cartílagos aritenoides. (Fig. 1)

Epiglotis, cartílago elástico con forma de paleta, situado en la parte alta de la laringe, anclado por su extremo inferior al ángulo entrante del tiroides, se moviliza activamente para cubrir el aditus laríngeo durante la deglución.

De los cartílagos pares los más importantes, por su función, son los cartílagos aritenoides, estructuras piramidales, de base triangular, que descansan en la placa cricoidea, existiendo a ese nivel una pequeña articulación sinovial. En la base de estos cartílagos se encuentran: la apófisis vocal, orientada hacia medial y donde se inserta el ligamento vocal; la apófisis muscular, orientada hacia lateral, donde se insertan los músculos cricoaritenoídeo lateral y cricoaritenoídeo posterior.

El lumen de la laringe (endolaringe) presenta dos pares de pliegues dispuestos en sentido anteroposterior: Por cefálico, los pliegues vestibulares (o cuerdas vocales superiores o falsas, en cuyo espesor se encuentra el ligamento vestibular), elementos que delimitan entre si la "rima vestibular"; por caudal, los pliegues vocales (o cuerdas vocales inferiores o verdaderas, en cuyo espesor se dispone el ligamento vocal) que delimitan entre si la "rima glotidis" o glotis, plano que divide al lumen en una región superior o supraglótica y otra inferior o infraglótica. A cada lado, entre pliegue vestibular y pliegue vocal se forma una hendidura que se extiende lateralmente, el ventrículo laríngeo (Fig. 2)

La entrada a la laringe recibe el nombre de inlet o aditus laríngeo y está limitada por la epiglotis (cubierta por mucosa) y los pliegues ariepiglóticos (pliegues mucosos extendidos oblicuamente entre los bordes de la epiglotis y el vértice de los cartílagos aritenoides). (Fig. 3) La región supraglótica puede dividirse en la zona vestibular, comprendida entre los pliegues ariepiglóticos y los pliegues vestibulares y, la porción ventricular descrita en el párrafo precedente. La región infraglótica se continúa con el lumen de la traquea.

En la región supraglótica, bajo la mucosa, encontramos una membrana cuadrangular; estructura fibroelástica que se extiende desde los bordes de la epiglotis hasta los ligamentos vestibulares, su borde posterior se encuentra contenido en el pliegue ariepiglótico. Del mismo modo, en la región infraglótica, bajo la mucosa, se encuentra el cono elástico o membrana cricovocal; estructura fibroelástica que se extiende desde el ligamento vocal hasta la cara interna del cartílago cricoides, su borde anterior engrosado forma el ligamento cricotiroideo medio.

La mucosa laríngea corresponde a un de epitelio de tipo respiratorio, es decir pseudoestratificado, ciliado, con abundantes glándulas mucosas. Sin embargo, a nivel de las cuerdas vocales inferiores el epitelio es de tipo pavimentoso (células planas dispuestas en varias capas).

La musculatura intrínseca de la laringe se organiza en torno a tres funciones:

Modificar el aditus laríngeo: Apertura, músculos tiroepiglóticos; cierre, músculos ariepiglóticos e interaritenoideos oblicuos.

Modificar la glotis: Abducción, músculo cricoaritenoideo posterior; aducción, músculo cricoaritenoideo lateral y músculo interaritenoideo (oblicuo y transverso).

Modificar al ligamento vocal: Tensa, músculo cricotiroideo; relaja, músculo tiroaritenoideo. El músculo vocal, que es parte del tiroaritenoideo, engruesa el pliegue vocal y ajusta la tensión del ligamento.

La acción de la musculatura extrínseca de la laringe se puede apreciar claramente en una laringoscopia.

La musculatura extrínseca de la laringe, representada por los músculos supra e infrahioideos, está involucrada en las funciones de ascenso (tirohioideo, palatofaringeo, estilofaringeo y constrictor inferior de la faringe) y descenso (esternohioideo y esternotiroideo) durante la deglución y la respiración(Fig. 4),( (Fig. 5)), (Fig. 6)

La irrigación de la laringe depende de las arterias tiroidea superior e inferior a través de sus ramas la laríngea superior e inferior respectivamente; la primera perfora la membrana tirohiodea y la segunda pasa a través de la membrana cricotiroidea. Los colectores venosos superiores desembocan por medio del tronco tirolinguofacial en la yugular interna; las venas inferiores drenan a través de las venas tirioideas media (hacia la yugular interna) y tirioideas inferiores (hacia la vena braquiocefálica izquierda).

El drenaje linfático del compartimentos supraglótico se dirige a los nodos superiores de la cadena yugular interna (nivel III clasificación TNM); la región infraglótica drena primero hacia los nodos pretraqueales (nivel VI) y luego a los linfonodos inferiores de la cadena yugular interna (nivel IV).

Respecto de la inervación, el nervio laríngeo superior inerva sensitivamente la región supraglótica (rama interna) y da un ramo motor al músculo cricotiroideo (rama externa); el nervio laríngeo inferior inerva sensitivamente la región infraglótica y sus ramos motores se distribuyen en el resto de la musculatura intrínseca de la laringe.


FARINGE

La faringe puede ser descrita como un canal mucoso, membranoso y muscular, extendido desde la base del cráneo hasta el nivel de la sexta vértebra cervical y abierto hacia ventral. La cavidad faríngea se relaciona sucesivamente, de arriba abajo con: las fosas nasales, nasofaringe (rinofaringe, también llamada epifaringe); con la cavidad bucal, bucofaringe (orofaringe, también llamada mesofaringe); y con la laringe, laringofaringe (o hipofaringe).

Estructuralmente este canal presenta de adentro hacia fuera una mucosa, una fascia y una capa muscular. La mucosa de la nasofaringe corresponde a un epitelio de tipo respiratorio, las porciones inferiores presentan una mucosa con un epitelio pavimentoso; la submucosa de la faringe presenta cúmulos de tejido linfoide que en algunos sectores se organiza formando las amígdalas. La fascia, llamada fascia faringobasilar, es firme y forma la estructura de soporte de la faringe. Sus inserciones son: en la base del cráneo (tubérculo faringeo y porción petrosa del temporal), en el borde posterior del ala medial del proceso pterigoídeo), en el rafe pterigomandibular, en la línea milohioídea de la mandíbula, en el ligamento tirohioideo lateral, en el borde posterior del cartílago tiroides y en la cara posterior del cricoides.

La capa muscular está compuesta por diez músculos, cinco a cada lado: tres músculos constrictores (superior, medio e inferior) imbricados, de abajo arriba, como tejas de un tejado, y dos músculos elevadores, el palatofaringeo y el estilofaríngeo. Por fuera de estos músculos se dispone un delicado tejido conectivo laxo, la fascia bucofaríngea. (Fig. 7)

El constrictor superior se origina en el borde posterior del ala medial del proceso pterigoídeo, el rafe pterigomandibular y a la línea milohioídea, dirigiéndose las fibras hacia atrás y arriba, al rafe medio de la faringe. El borde superior del músculo deja un espacio en relación con la base del cráneo, lugar por donde ingresan el músculo elevador del velo del paladar y la tuba auditiva.

El constrictor medio se extiende desde el ligamento estilohioideo y el asta mayor del hioides hacia el rafe medio. Entre el constrictor medio y el superior se disponen el músculo estilofaringeo y el nervio glosofaríngeo.

El constrictor inferior es el más extenso y se origina en el borde posterior y en la línea oblicua de la cara lateral del cartílago tiroides y en la cara lateral del cricoides, dirigiéndose las fibras hacia arriba y atrás al rafe medio. Entre el constrictor inferior y el medio se disponen el nervio laringeo interno y los vasos laringeos superiores. Entre el constrictor inferior y el esófago transcurren el nervio recurrente laringeo y los vasos laringeos inferiores.

Respecto de los músculos elevadores: El estilofaringeo se origina en el aspecto medial del proceso estiloides y de allí desciende hacia abajo y medial, cruza entre los constrictores superior y medio, para terminar insertándose en el aspecto medial de la pared lateral de la faringe y en el cartílago tiroides. El palatofaringeo se origina desde la aponeurosis palatina y del paladar óseo, presentando una extensión que proviene de la tuba auditiva (porción salpingea); desciende en relación con la cara medial de la buco faringe, donde forma el pilar posterior del velo del paladar, para terminar en el aspecto medial de la pared lateral de la faringe y en el cartílago tiroides.

Analizando la endofaringe se puede describir que la porción nasal (cavum) se extiende desde la bóveda de la faringe hasta el velo del paladar, presentando una altura 4 cm, un ancho de 4 cm y 2 cm en el eje antero posterior. Hacia ventral comunica con las coanas. En su pared lateral desemboca la tuba auditiva, zona que está limitada inferiormente por el pliegue salpíngeo y ventralmente por el rodete tubárico. En el techo de la nasofaringe se encuentra la amígdala faringea; en relación con la desembocadura de la tuba auditiva se encuentra la amígdala tubárica.

La orofaringe se extiende desde el velo del paladar hasta un plano horizontal que pasa por el borde superior de la epiglotis. Volumetricamente corresponde a un cubo de 4 cm. de arista. Hacia ventral comunica con la cavidad bucal a través del istmo de las fauces, estrecho formado por los pliegues palatoglosos (pilares anteriores del velo). En su pared lateral, entre los pilares anterior y posterior del velo palatino se ubica la amígdala palatina.(Fig. 8)

La laringofaringe se continúa con el extremo superior del esófago. Corresponde a la región más estrecha de la faringe, adoptando la forma de un embudo con un diámetro superior de 3 a 4 cm. y un diámetro inferior sólo de 1,5 cm. La laringe se proyecta hacia el lumen de la laringofaringe, situación que explica las crisis de sofocación provocadas cuerpos extraños retenidos en esta zona. Entre la laringe y la pared faringea se forman los recesos piriformes, por los cuales se desplaza el bolo alimenticio hacia el esófago.

La irrigación de la faringe proviene de las arterias faríngea ascendente, ptérigopalatina, palatina inferior y tiroidea superior. Las venas forman un plexo que drena hacia la yugular interna. Los linfáticos se dirigen a los nodos retrofaríngeos (nasofaringe) y a cinco o seis linfonodos de la cadena yugular interna ubicados por debajo del vientre posterior del digástrico (buco y laringofarínge). La inervación motora y sensitiva proviene de los nervios vago y glosofaríngeo a través del plexo faríngeo.


TRAQUEA

La traquearteria es un conducto cartilaginoso, formado por quince a veinte arcos cartilaginosos abiertos hacia dorsal cerrados posteriormente por fibras musculares lisas, el músculo traqueal. Presenta una cubierta interna mucosa con un epitelio de tipo respiratorio. Situada delante del esófago, este conducto se extiende desde el cricoides, terminando en el tórax, dando origen a los bronquios. El segmento cervical de la traquea comprende los seis o siete primeros anillos traqueales. Dispuesta oblicua hacia abajo y atrás, la tráquea es más profunda cuanto más cerca de la horquilla del esternón. La tráquea sigue en sus desplazamientos a la laringe, a la cual se encuentra unida por los ligamentos y por el músculo cricotraqueal. La longitud del segmento cervical de la tráquea va desde 4,5 cm. en el niño a 6,5 cm en el adulto, longitud que aumenta cuando la cabeza se coloca en extensión. Su calibre es uniforme en toda la longitud del conducto, siendo de 0,5 cm en el recién nacido, de 1 cm en el niño y de más 2 cm. en el adulto.

Hacia ventral la tráquea se relaciona, de cefálico a caudal, con el istmo de la glándula tiroides, con las venas tiroideas inferiores y con el tronco venoso braquiocefálico. Los bordes mediales de los músculos infrahioídeos delimitan en la línea un alargado rombo, el rombo de la traqueostomía, donde entre la piel y la traquea sólo se encuentran las hojas superficial y media de la fascia cervical profunda. Hacia dorsal está en relación con esófago. Por lateral toma contacto con los lóbulos tiroideos que abrazan su parte superior, para tomar relación luego con la vaina carotidea. Lateral a la traquea se dispone la vaina carotidea La irrigación de la traquea cervical proviene de las arterias tiroideas inferiores, las venas drenan en las venas tiroideas inferiores; los linfáticos se dirigen a los nodos inferiores de la cadena yugular interna y a los nodos que acompañan a los nervios laríngeos recurrentes. Esófago cervical. El esófago cervical está situado detrás de la tráquea y ventral a la región prevertebral. Comienza a nivel del cartílago cricoides y termina a nivel del borde superior del esternón. Su calibre es de alrededor de 2 cm., presentando un estrechamiento a nivel del cartílago cricoides. Su longitud es de 5 cm. Hacia ventral el esófago se relaciona con la cara posterior de la tráquea; hacia lateral con el tronco simpático cervical, la arteria tiroidea inferior, la vaina carotidea, la glándula tiroides y el nervio recurrente; hacia dorsal el esófago se corresponde con la columna vertebral (C6 C7). (Fig. 9)

La irrigación del esófago cervical proviene de las arterias tiroideas inferiores, las venas drenan en las tiroideas inferiores y Los linfáticos se dirigen a los nodos inferiores de la cadena yugular interna y a los nodos que acompañan a los nervios recurrentes.


GLANDULA TIROIDES

Su forma recuerda la de una H mayúscula con sus dos lóbulos laterales unidos por el istmo. Se ubica en el compartimiento visceral del cuello, cubierta por los músculos infrahioideos, en especial por el esternotiroideo. Presenta una envoltura propia, la cápsula tiroidea que la rodea y por fuera de ella se dispone una dependencia de la fascia cervical profunda, la vaina tiroidea. En el espacio entre cápsula y vaina se disponen los vasos tiroideo (plano vascular) y, en relación con el borde posterior de los lóbulos, las glándulas paratiroides.(Fig. 10)

La cara interna de los lóbulos tiroídeos toma contacto con la tráquea y la laringe. La cara posterior de los lóbulos está en íntima relación con la vaina carotidea. Como toda glándula endocrina presenta numerosos pedículos vasculares: La arteria tiroidea superior, rama de la carótida externa; la tiroidea inferior, rama de la subclavia, que toma relación con el nervio recurrente al aproximarse hasta el lóbulo tiroideo. La tiroidea media (de Neubauer) que, cuando existe, puede originarse del tronco braquiocefálico o del cayado aórtico.

Las venas tiroideas presentan abundantes anastomosis formando el plexo tiroideo, desde donde surgen tres grupos de venas: 1) las venas tiroideas superiores que desembocan, a través del tronco tirolinguofacial, en la yugular interna; 2) las venas tiroideas medias, que también desembocan en la yugular interna; 3) las venas tiroideas inferiores, que se dirigen al tronco braquiocefálico. La linfa de la glándula se dirige primero a los nodos pretraqueales (nivel VI)y luego a los linfonodos inferiores de la cadena yugular interna (nivel IV).


GLANDULAS PARATIROIDES

Estructuras pequeñas, del tamaño de una lenteja, que en número de cuatro, dos por cada lado, se disponen en relación con la cara posterior de los lóbulos tiroideos. Estas glándulas se encuentran ubicadas dentro de la fascia pero fuera de la cápsula tiroidea, en el plano vascular. Las paratiroides superiores pueden encontrase al nivel del borde inferior del cartílago tiroides, el relación con la anastomosis longitudinal entre las arterias tiroidea superior e inferior. Las paratiroides inferiores se ubican en relación con el polo inferior del lóbulo tiroideo, en relación con la llegada de la arteria tiroidea inferior a esta glándula.

 

 
 

PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE CHILE
ESCUELA DE MEDICINA
DEPARTAMENTO DE ANATOMÍA