GUIA DE ACTIVIDADES PRACTICAS

Riñón, ureter, glándula suprarrenal y vasos abdominales. ( ver organogénesis de aparato urinario )

Los riñones son órganos retroperitoneales aplicados sobre la pared abdominal posterior, a los lados de la columna vertebral, en el surco paravertebral, extendidos entre las vértebras T12 y L3. Los riñones, la glándula suprarrenal, la grasa perirrenal y los elementos del pedículo renal se encuentran dentro de una formación sacular, la celda renal, formada por una extensión de la fascia transversalis conocida como fascia renal. Este tejido conectivo en relación con el borde lateral del riñón se abre en dos hojas, una pasa por ventral y otra que pasa por dorsal del riñón y de los elementos mencionados en el párrafo anterior. Hacia cefálico, por sobre la glándula suprarrenal, las dos hojas se fusionan y se continúan con la fascia diafragmática. Hacia caudal, las dos hojas se unen al nivel de la fosa iliaca y se continúan con la fascia pélvica. Hacia medial, las dos hojas se unen en relación con los elementos del pedículo renal. Entre riñón y la glándula suprarrenal se interpone una lámina de fascia renal, de modo tal que todas las relaciones del riñón y de la glándula suprarrenal se establecen a través de la fascia renal. En el riñón se describen: un polo superior (en relación con la glándula suprarrenal), un polo inferior (que se encuentra más o menos a 4 cm. de la cresta iliaca), un borde medial cóncavo (dónde se ubica el hilio renal), un borde lateral convexo, una cara anterior (en relación con las vísceras abdominales) y una cara posterior aplicada sobre los músculos psoas y cuadrado lumbar, estableciendo aquí relaciones con los nervios subcostal (T12), ilio hipogástrico (L1) e ilio inguinal (L1) .FIG1, FIG2 , FIG2A , FIG2B y Corte 14

Las dimensiones del riñón son 10 cm. de longitud, 5 cm. de ancho y 2,5 cm. de espesor. El eje mayor de ambos riñones es convergente hacia cefálico y su cara anterior está orientada hacia lateral. La mitad superior de la cara posterior de los riñones se relacionan con el diafragma, de modo que sufren un descenso de 2 a 3 cm. con los movimientos inspiratorios. La presencia del hígado hace que el riñón derecho se encuentre más descendido que el riñón izquierdo. A través del hilio renal, que se encuentra a nivel del plano transpilórico (L1, L2), se accede a un espacio labrado en el espesor del riñón, el seno renal, donde se encuentran las ramas de los vasos renales, la pelvis renal y los cálices, nervios y la grasa perirrenal. Además, se proyectan en el seno renal las papilas renales y el extremo interno de las columnas renales. El riñón presenta una cápsula fibrosa adherida a su superficie, la cápsula renal, que se introduce y limita las paredes del seno renal. En un corte longitudinal de riñón se aprecia claramente dos zonas de textura diferente: una porción externa, granulosa, de color rojo pálido, la corteza renal y; una porción interna, rojo oscura, de aspecto estriado, la médula renal. La corteza renal tiene más o menos 1 cm. de espesor y presenta 7 a 8 proyecciones radiadas, orientadas hacia el seno renal, las columnas renales (de Bertin). Estas columnas renales separan al tejido medular, el cual aparece como 8 a 10 porciones cónicas, las pirámides renales (de Malpighi), cuya base se apoya sobre el tejido cortical y cuyo vértice se asoma hacia el seno renal, conformando allí las papilas renales.FIG.3

La unidad estructural y funcional del riñón es la nefrona, y cada riñón consta de más o menos un millón de ellas. La nefrona está formada por: 1.- El corpúsculo renal, formado por el glomérulo (ovillo de capilares sanguíneos) y la cápsula glomerular (de Bowman); copa membranosa de doble hoja que rodea al glomérulo y que presenta un espacio, el espacio urinario, donde se filtra la orina primaria. 2.- El túbulo contorneado proximal, cuyo lumen se continua con el espacio urinario. 3.- El asa renal (de Henle). 4,. El túbulo contorneado distal, que mediante un segmento de conexión, se continua con el túbulo colector. El túbulo colector recibe la orina de varias nefronas y cruzando la porción cortical y medular del riñón se abre en la papila renal. Allí, mediante una lupa es posible ver la desembocadura de 15 a 20 tubos colectores por cada papila. La irrigación nutricia y funcional del riñón está dada por la arteria renal. Esta rama de la aorta se divide, antes de pasar por el hilio, en arterias segmentales (Superior, anterosuperior, anteroinferior, inferior y posterior). Cada una de estas ramas segmentales tiene una distribución de tipo terminal, siendo el segmento posterior el más extenso. Esta situación hace que sea posible reconocer una línea avascular (relativa) en la zona posterior del borde lateral del riñón (línea de Brodel), donde se separan los territorios de irrigación de los segmentos anteriores con el segmento posterior. En el seno renal las arterias segmentales desprenden sus ramas iniciales (y cortas) las arterias lobares, una para cada pirámide renal. Antes de entrar en la sustancia renal cada arteria lobar se divide en dos arterias interlobares las que se dirigen hacia la corteza, ocupando la zona periférica de las columnas renales. En relación con la base de la pirámide renal, las arterias interlobares dan origen a las arterias arqueadas o arciformes, las cuales contornean la base de la pirámide renal y emiten hacia la corteza las arterias interlobulillares. Estas arterias se disponen perpendiculares a la superficie renal y de ellas surgen las arterias aferentes, las cuales se capilarizan formando el glomérulo renal. Desde el glomérulo surge la arteria eferente, que va a generar una segunda red capilar, en relación con los túbulos renales. En aquellos glomérulos cercanos a la base de las pirámides (yuxtamedulares), la arteria eferente forma un vaso recto que desciende hacia la médula renal (las arterias rectas), capilarizándose en relación con el asa renal (de Henle) (la red peritubular). Desde estas redes capilares surgen las venas (venas rectas, venas interlobulillares, venas arqueadas, venas interlobares, etc.) que finalmente forman la vena renal. De modo que el riñón tiene dos redes capilares en serie (el glomérulo y la red peritubular) unidas por un vaso arterial, la arteria eferente; esta situación conforma lo que se denomina una red admirable, que existe sólo en el riñón. Cada pirámide con la corteza subyacente a ella constituye un lóbulo renal; de modo tal que el número de lóbulos es igual al número de papilas renales. En el riñón fetal se aprecia, en la superficie renal, la disposición lobular; característica que desaparece a medida que el sujeto crece. En el adulto los lóbulos renales pueden ser reconocidos a partir de la distribución vascular (arterias lobulares, ramas de las arterias segmentales).FIG.4

La orina excretada por los tubos colectores a nivel de la papila renal es recogida por unos conductos cónicos, los cálices menores. Estos conductos están formados por la mucosa, interna y una capa muscular lisa, sobre la cual se dispone una delgada capa de tejido conectivo. Cada riñón tiene entre 8 a 10 cálices menores. En cada riñón 3 o 4 cálices menores convergen para formar un cáliz mayor, que es similar en estructura al cáliz menor. Estos cálices mayores y menores se ubican en el seno renal, rodeados por ramas arteriales vasos linfáticos y nervios, además de la grasa perirrenal. Los cálices mayores de cada riñón convergen formando la pelvis renal; esta estructura tiene una forma de embudo membranoso (constituido de la misma forma que los cálices mayores), que sale por el hilio renal para continuarse con el uréter. En torno a la pelvis renal se disponen las ramas segmentales de la arteria renal, colocándose la arteria segmental posterior en situación retropiélica (detrás de la pelvis renal) .ECO1

Uréter: Conducto muscular que transporta la orina desde la pelvis renal hasta la vejiga urinaria. Mide más o menos 30 cm. de longitud y presenta una mitad en la región abdominal y otra mitad en la región pélvica. La porción abdominal se dispone detrás del peritoneo parietal, aplicada sobre el músculo psoas. Esta porción del uréter, en ambas antímeras, es cruzada ventralmente por los vasos gonadales y por los vasos cólicos. La porción inicial del uréter derecho toma relación hacia ventral con el duodeno, y la porción distal del uréter izquierdo es cruzado por la raíz del mesocolon pélvico. Los uréteres cruzan el estrecho pélvico, pasando por encima de los vasos ilíacos (el uréter derecho lo hace sobre la arteria iliaca externa y el uréter izquierdo lo hace sobre la arteria iliaca común), para continuarse con la porción pélvica.FIG5,. FIG 6,. FIG 7.

La porción pélvica del uréter transcurre por debajo del peritoneo, aplicado inicialmente sobre la pared pélvica, en relación con las ramas de la arteria iliaca interna; en la mujer el relieve formado por el uréter pélvico forma el límite posterior de la fosa ovárica. Luego el uréter cruza hacia abajo y medial para desembocar en la vejiga. En el hombre, esta porción distal del uréter pélvico es cruzado ventralmente por el conducto deferente y toma relación con el fondo de la vesícula seminal. En la mujer esta porción distal del uréter pélvico transita en la base del ligamento ancho y es cruzada ventralmente por la arteria uterina. Los uréteres cruzan oblicuamente hacia abajo y hacia medial la pared vesical para abocarse en su lumen. Los orificios vesicales de los uréteres limitan los ángulos laterales del trígono vesical. Estructuralmente el uréter presenta las mismas capas que la pelvis renal: una mucosa (uroepitelio transicional), una capa muscular media (musculatura lisa dispuesta en una hoja interna longitudinal y en una hoja externa circular), una adventicia externa (tejido laxo, por donde transita la irrigación y la inervación para el uréter). A lo largo de su trayecto el uréter presenta tres estrechamientos: el primero a nivel de la unión ureteropiélica, el segundo a nivel de los vasos iliacos, en la parte media del trayecto del uréter; el tercero estrechamiento se ubica en la porción intramural (vesical) del uréter. La irrigación del uréter es sectorial de modo que la porción abdominal recibe las ramas de la arteria gonadal y finas ramas directamente de la aorta. La porción pélvica es irrigada por ramas de las arterias iliacas, vesicales y uterinas. Las venas acompañan a estos pedículos vasculares y los linfáticos drenan en los nodos latero aórticos, iliacos comunes, e iliacos internos.FIG. 8., FIG 9 y Corte 18

Glándulas suprarrenales Estas glándulas de secreción interna tienen una situación retroperitoneal y adoptan la forma triangular o semi lunar, colocadas sobre el polo superior de sus respectivos riñones, extendiéndose algo sobre la cara anterior de ellos. Sus dimensiones son 5 cm. de longitud 3cm. de alto y 1 cm. de espesor, siendo de tamaño proporcionalmente mayor en el feto que en el adulto. Se encuentran contenidas dentro de la celda renal. Al corte se reconoce una porción periférica, la corteza suprarrenal (originada del epitelio celómico) y una porción central, la médula suprarrenal (originada de las crestas neurales). La glándula suprarrenal derecha se encuentra entre la vena cava inferior y el pilar derecho del m. diafragma. La porción superior toma relación con el área desnuda del hígado y la porción inferior está en contacto con el peritoneo parietal que limita la bolsa hepatorrenal. La glándula suprarrenal izquierda se extiende más por el borde medial del riñón, su porción superior forma parte del lecho gástrico y está cubierta por el peritoneo parietal del saco menor; la porción inferior contacta con la cola del páncreas. Como ocurre con todas las glándulas endocrinas, las suprarrenales tienen una profusa irrigación que proviene de tres fuentes vasculares: Las arterias adrenales superiores (de 6 a 8), originadas desde la arteria frénica inferior; las arterias adrenales medias (una o dos), ramas directas de la aorta abdomina; las arterias adrenales inferiores (cinco a diez) originadas desde la arteria renal. En contraste, existe sólo una vena adrenal derecha que drena en la vena cava inferior y sólo una vena adrenal izquierda que drena en la vena renal izquierda. Los linfáticos de las glándulas suprarrenales drenan hacia los nodos lateroaórticos. FIG10

Aorta abdominal Se extiende desde el hiato aórtico del m. diafragma, ubicado a nivel de T12, hasta la cara anterior de L4, donde se divide en las arterias iliacas comunes derecha e izquierda. Colocada detrás del peritoneo, a lo largo de su trayecto emite:

1.- Ramas parietales pares, como las arterias frénicas inferiores y las cuatro arterias lumbares; ramas que irrigan al m. diafragma y la pared póstero lateral del abdomen respectivamente. Como ya vimos las arterias frénicas inferiores generan las ramas adrenales superiores. Las arterias lumbares, se dividen en una rama anterior y una rama posterior. La rama anterior irriga la pared póstero lateral del abdomen y se anastomosa, en la vaina del recto abdominal, con la arteria epigástrica inferior. El ramo posterior emite arterias espinales que acompañan a los nervios espinales, cruzan el foramen intervertebral, y se extienden irrigando la médula espinal, la cauda equina y las meninges. 2.- Ramos parietales impares: La arteria sacra media, que desciende hacia la pelvis y se anastomosa con las arterias sacras laterales, ramas de la iliaca interna, para irrigar la pared pélvica y las raíces del plexo sacro. 3.- Ramos viscerales pares: Las arterias adrenales medias, arterias renales, las arterias gonadales. 4.- Ramos viscerales impares: El tronco celíaco, la arteria mesentérica superior y la arteria mesentérica inferior. En su trayecto, la aorta abdominal es cruzada ventralmente por: el cuerpo del páncreas y la vena esplénica (entre el origen del tronco celíaco y de la mesentérica superior); la tercera porción del duodeno y la vena renal izquierda (entre el origen de la arteria mesentérica superior e inferior).

Vena cava inferior: situada detrás del peritoneo, a la derecha de la aorta, se extiende desde la quinta vértebra lumbar (donde se forma por la unión de las venas iliacas comunes derecha e izquierda) hasta el orificio diafragmático para la vena cava (foramen de la vena cava), ubicado en el centro tendinoso del m. diafragma, a nivel de T8. Sus tributarias son: las venas lumbares tercera y cuarta, la vena gonadal derecha, las venas renales, la vena suprarrenal derecha, la vena frénica inferior derecha y las venas hepáticas (suprahepáticas). Las venas gonadal, suprarrenal y frénica inferior del lado izquierdo drenan en la vena renal izquierda. A lo largo de su trayecto la vena cava inferior es cruzada ventralmente por: la raíz del mesenterio, la arteria gonadal derecha, y la tercera porción del duodeno. En la parte final de su trayecto forma el límite posterior del foramen omental y luego se coloca detrás del área desnuda del hígado. La vena cava inferior y sus afluentes no presentan válvulas con excepción de las venas gonadales. .FIG 11, FIG12 y Corte 12

Linfáticos: en relación con los pedículos arteriales viscerales impares de la aorta se ubican grupos de linfonodos conocidos como nodos preaórticos (celíacos, mesentéricos superiores y mesentéricos inferiores), donde drena la linfa de los órganos irrigados por esas arterias. Del mismo modo, a los lados de la aorta se ubica nodos lateroaórticos, que drenan la linfa de los órganos irrigados por las ramas laterales (viscerales y parietales) de la aorta abdominal. De modo que el drenaje linfático de cualquier víscera retorna acompañando a la arteria que lo irriga, hasta los nodos ubicados en el punto de origen de esa arteria en la aorta. Desde estos grupos de linfonodos (preaórticos, latero aórticos) surgen colectores que desembocan en la cisterna del quilo. Esta formación linfática sacular se encuentra sobre el cuerpo vertebral de L2, entre la aorta y el origen de la vena ázigos, y desde ella surge el conducto torácico que asciende, junto con la aorta, por el hiato aórtico hacia el tórax.

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