El cerebro humano ha evolucionado durante un largo período. En la actualidad se sabe que su desarrollo toma en cada persona los primeros años de su vida y que dicho proceso se relaciona con la adquisición del control motor, del control locomotor, del control del lenguaje y del pensamiento.

El desarrollo cerebral después del nacimiento es dinámico y variable en las diferentes regiones cerebrales. Los cambios son estructurales, metabólicos y se manifiestan con cambios en la actividad eléctrica cerebral.

El grosor de la corteza cerebral cambia durante la maduración pero no en forma uniforme. La corteza visual ya tiene el grosor de la del adulto a los seis meses de edad. En cambio en las otras regiones, como las áreas de asociación visual, ese grado de desarrollo se alcanza a los diez años. Sin embargo, las circunvoluciones ya están formadas en el momento de nacer.

El volumen de la corteza cerebral depende del número de neuronas y del desarrollo de los procesos neuronales, por lo que ha sido un parámetro muy difícil de evaluar cuantitativamente. Sin embargo, donde se han observado cambios importamntes es en la capa V1, capa que muestra una gran expansión hasta los 4 meses de edad. Posteriormente la densidad neuronal en esa capa disminuye hasta estabilizarse despues de los 4-5 meses de edad describiéndose que el número de neuronas permanece, en ella, constante, hasta los 70 años de edad.

Estos cambios de volumen y de densidad neuronal se han correlacionado con el desarrollo y crecimiento de axones, dendritas y de células gliales.