La familia cucurbitácea comprende numerosas especies que poseen características distintivas. Son plantas anuales o perennes cultivadas comercialmente como anuales (alcayota), sensibles a heladas y daño por enfriamiento. Las plantas son en general de hábito postrado y rastrero, pudiendo ser algunas guiadoras gracias a la presencia de zarcillos. Las hojas son alternas, sin estípulas, de lámina simple, usualmente lobuladas en las especies de interés hortícola. Son plantas de polinización entomófila, cuyas flores son axilares, casi siempre solitarias, de color blanco o amarillo, de forma acampanada, y generalmente son monoicas aunque existen formas andromonoicas. Las flores femeninas son de ovario ínfero y por esta razón dan origen a un fruto denominado pepo o baya falsa, el que es multiseminado con excepción del chayote que posee una sola semilla. En las flores masculinas, el número básico de estambres es cinco, pero en algunos géneros aparentan ser tres, debido a un proceso de fusión (dos pares unidos o adnados). Las flores masculinas aparecen primero y son más numerosas que las femeninas. Las cucurbitáceas como familia, son plantas de siembra directa, ya que su sistema radical no es capaz de resistir un trasplante a raíz desnuda. Si fuera de interés realizar un cultivo de almácigo-trasplante, este debe ser con raíz cubierta, por lo que es necesario algún tipo de recipiente. La familia cucurbitácea incluye once especies de mayor interés agrícola, las que están agrupadas en cinco géneros :

Género Especie Nombre vulgar
Citrullus lanatus Sandía
Cucumis melo

sativus

Melón

Pepino

Cucurbita ficifolia

maxima

mixta

moschata

pepo

Alcayota

Zapallo

Zapallo

Zapallo

Zapallo italiano

Luffa cylindrica

acutangula

Lufa

Lufa

Sechium edule Chayote