Asentamiento español

Retrato

Una vez consolidada la conquista peninsular de la capital azteca y aniquiladas las capas dirigentes de la sociedad indígena, se procedió a la reconstrucción de la ciudad y al reparto de la mano de obra. Sobre las ruinas y con los restos de los templos aztecas destruidos, se erigieron los primeros edificios de la que sería la capital del virreinato de Nueva España: ciudad de México. Cortés, confirmado en sus poderes por la corona, fue beneficiado con una encomienda de 22 mil indígenas que incluía más de siete poblados, además de recibir como premio el valle de Oaxaca y el título de marqués. Luego, distribuyó encomiendas entre sus hombres y financió una serie de expediciones de conquista al sur y al norte del territorio dominado.

Códice

A fines de 1528 arribaron a ciudad de México los cinco integrantes de la Real Audiencia , nombrados por el Consejo de Indias, para poner orden y administrar en favor del rey los nuevos dominios. El principal problema era el maltrato al indígena, situación en la cual la Audiencia no fue capaz de resolver nada a raíz de la corrupción de sus miembros. Ante esto, se nombró una segunda Audiencia gobernadora que se mantuvo en funciones desde 1530 hasta la llegada del primer virrey de Nueva España, Antonio de Mendoza, en 1535. Durante este período se prohibió la esclavitud del indígena, pero se les fijó un tributo, y se consagró el predominio de la autoridad de la corona de España por sobre de la de los conquistadores.

Bautizo de jefe indígena

También hay que destacar la labor desempeñada por la Iglesia, y particularmente por las Órdenes religiosas. Franciscanos y Dominicos, conscientes de lo ocurrido en las Antillas, intentaron desde un comienzo mitigar los abusos de los encomenderos. Además se preocuparon de la descendencia de la clase dirigente azteca, creándose por ejemplo el Colegio de Santa Cruz de Tlatelolco que impartía catequesis y procuró conservar la lengua y la historia nativa. Mención aparte merece la labor cumplida por el fraile Bernardino de Sahagún, quien recopiló una gran cantidad de las tradiciones indígenas en la monumental Historia General de las cosas de la Nueva España..

Códice Azcatitlan

En cuanto a la primitiva organización socioeconómica, en México se impuso un grupo de conquistadores, de origen humilde en muchos casos, sustentados en la posesión de encomiendas y la explotación de yacimientos mineros de oro y, especialmente, plata. Justamente para contrarrestar el poder de este grupo, la corona envió a sus funcionarios, oidores, corregidores y visitadores. Por lo tanto, los años de formación del virreinato mexicano no estuvieron exentos de pugnas de poder las cuales finalmente se resolvieron en favor de la corona. Ya desde la segunda mitad del siglo XVI, las actividades económicas cobraron mayor importancia, lo que se reflejó en la proliferación de haciendas, estancias y múltiples centros mineros que imprimieron su sello al período colonial.