Fuentes de subsistencia

Indígena amazonico pescando

Los pueblos amazónicos eran fundamentalmente cazadores, pescadores y recolectores. Al igual que en la zona maya, las condiciones selváticas y los suelos pobres no permitían el uso prolongado de una superficie agrícola, lo cual impedía, asimismo, el asentamiento fijo. La ausencia de animales domesticables explica la inexistencia de ganadería.

Servatana

En relación con la caza, se empleaban arcos de gran tamaño (hasta tres metros) con flechas envenenadas. La cuerda de los arcos se fabricaba de fibra vegetal trenzada. El veneno solía ser el curare de origen vegetal y de un poder mortífero inmediato. Sin duda alguna, la cerbatana era el arma más difundida en la Amazonía, y lo continúa siendo hasta el día de hoy. Consiste en un tubo de unos 2,5 a 3 metros en el que se coloca una flechita con la punta envenenada, la cual es movida con un simple soplo que puede llevarla hasta cuarenta metros de distancia.

Un rasgo propio de los indígenas que poblaban el Brasil actual es su habilidad artística. Prácticamente todos los miembros de una tribu eran expertos artesanos y cada uno elaboraba sus pertenencias (cestos, hamacas, arcos y flechas, ornamentos, trampas, canoas) al igual que su vivienda.

Artesana

La creatividad se expresaba en gran medida en los adornos y las pinturas corporales que solían remplazar la ropa. Destacan los ornamentos de plumas en el cuello, muñecas, tobillos o cintura; máscaras de paja; piedras de jadeíta verde aguzadas que atravesaban las mejillas, la nariz o el labio inferior; el uso de discos de madera en los labios; tatuajes en el rostro y pinturas de gran colorido y una impresionante diversidad de motivos simbólicos.

Todavía podemos admirar parte de estas costumbres en los pueblos del parque nacional xingú, los kayapos y los yanomamis que aún sobreviven penosamente en la Amazonía, luchado por preservar su cultura.