CLASIFICACIÓN

Se ha intentado hacer muchas clasificaciones de estas unidades con valor conectivo; sin embargo, una orientación lógico-semántica y pragmática permitirá clasificar este complejo y heterogéneo conjunto de enlaces. De acuerdo con los planteamientos de B. Pottier (1993) y su modelo semántico del continuo, se podrían distribuir estas partículas dentro de los tres momentos relevantes en el proceso evolutivo de un acto discursivo:

Apertura Seguimiento Cierre
|------------> |--------------> |-------------->|

Esta visión prospectiva (apertura), coincidente (seguimiento) y retrospectiva (cierre) del acto comunicativo, permite clasificar los conectores textuales en tres grupos. En cada uno de ellos, se agruparán los enlaces, que, a su vez, se subdividirán de acuerdo con los diferentes valores y matices que representan (adición, oposición, causalidad, equivalencia, inclusión, etc.).

Valores de conectores con visión de seguimiento

En los conectores con visión de seguimiento se distinguen cinco subgrupos que explicitan los valores siguientes:

  1. Adición: ellos aportan una relación lógica de amplificación; se narran dos hechos que se añaden el uno al otro (A + B).
  2. Continuidad: indican una continuación de ideas dentro del discurso y siguen en una misma línea argumentativa.
  3. Orden: expresan orden, distribución espacial, temporal o nocional del contenido.
  4. Conformidad: presuponen una relación de equivalencia, inclusión y causalidad.
  5. Disconformidad: su significado básico es expresar algo contrario a lo que se espera, una oposición; algunos corrigen la información que le precede, otros la niegan o bien señalan dos hechos que aparentemente incompatibles aparecen juntos.

FUNCIONAMIENTO

Ya se ha visto que los conectores, como un sistema de marcas de relación, indican las relaciones funcionales entre los contenidos proposicionales de los enunciados (relaciones del tipo: ejemplificación, oposición, causalidad, etc.). Los conectores indican que una unidad tiene por finalidad amplificar, justificar, corregir, reformular o cerrar otra unidad que ha sido producida anteriormente. Ahora bien, de acuerdo con la tipología presentada se describirá su funcionamiento.


Función de topicalización
Función de adición
Función de continuidad
Función de orden
Función de conformidad (equivalencia, inclusión y causalidad)
Función de disconformidad (oposición)
Función de cierre

Función de topicalización

La función de los conectores de topicalización es asegurar la progresión del discurso a partir de un determinado tópico; ellos presentan una visión prospectiva del acto enunciativo que introducen y acompañan al elemento que se quiere topicalizar separándolo del resto del enunciado por una pausa. Enlaces tales como: en cuanto a, en lo que se refiere a, al respecto...

 

Función de adición

Los enlaces con valor de adición marcan un relación lógica de suma. En una relación aditiva se narran dos hechos que se añaden el uno al otro sin indicar ninguna otra relación entre sí. Ejemplos: y, además, asimismo, incluso, más aun...

 

Función de continuidad

Los conectores que expresan continuidad se usan como meros enlaces para mantener la atención del interlocutor, a veces sirven para introducir una información adicional que confirma o refuerza lo que se está expresando; otras veces para enfatizar un cambio de tema o simplemente para organizar las partes de un texto por deseo de claridad. Ejemplos: por otro lado, entonces, bueno, ahora bien, por cierto...

 

Función de orden

Los ordenadores discursivos sirven para establecer las partes del texto como marcas de su organización macroestructural. Algunos indican un orden lineal en la exposición. Ejemplo: para empezar. Otros introducen ya sea una relación de enumeración o de distribución del contenido. Los de enumeración organizan linealmente en una serie la actividad discursiva, ellos marcan la progresión del discurso. Los de distribución pueden segmentar el texto en dos partes o hacer referencia al modo como se organiza la realidad en cuanto al orden cronológico de los acontecimientos. Ejemplos: primero... segundo... tercero...; por una parte ... por otra; primero... enseguida... luego... finalmente... etc.

 

Función de conformidad (equivalencia, inclusión y causalidad)

Los conectores de equivalencia, llamados también reformulativos tienen como misión relacionar dos enunciados contiguos a modo de paráfrasis y expresan contenidos textuales diversos ya sea correctivo, explicativo o recapitulativo. El hablante aclara, precisa, reinterpreta o reformula en otros términos el contenido de su enunciación; recupera lo que quiere decir y expresa por segunda vez su intención comunicativa. Ejemplos: es decir, o sea, a saber, mejor dicho, en otras palabras, etc.

Los conectores con valor de inclusión expresan una relación lógica de inclusión entre dos enunciados: el segundo aporta una aclaración parcial del contenido del primero y los enlaces que los conectan son expresiones de sentido ejemplificatorio: por ejemplo; así; así, por ejemplo, etc.

Los enlaces consecutivos hacen alusión exclusivamente a la conexión causa-efecto: esta relación de causalidad tiene por objeto la explicación de la consecuencia. Ejemplos: pues, por lo tanto, por consiguiente, en consecuencia, entonces, de hecho, etc.

 

Función de disconformidad (oposición)

Los relacionantes de oposición manifiestan un contenido presuposicional de disconformidad y suponen que los miembros que se unen expresan contenidos contrapuestos. En otras palabras, es expresar algo "contrario a lo que se espera." Enlaces como pero, en cambio, sin embargo, no obstante, al contrario, ahora bien, antes bien, etc.

 

Función de cierre

Los conectores con visión de cierre expresan una visión retrospectiva de los contenidos enunciados anteriormente; pueden incluir valores añadidos como resumen, conclusión y cierre. Ejemplos: en resumen, en conclusión, por último, etc.